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_bC581c 2008
110 _aAsociación de peatones de Quito
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245 1 3 _aLa ciudad y los peatones:
_bmanual de espacio público pensado para el peatón /
_cAsociación de peatones de Quito
250 _aPrimera edición
264 1 _aQuito:
_bFondo Ágil,
_c2008
300 _a57 páginas:
_bilustraciones;
_c21 cm
336 _atxt
337 _2rdamedia
_an
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505 2 _aLos peatones y los carros - Los cruces - Las aceras - Las vías y los peatones - Redes peatonales y verdes
520 3 _aHubo un momento en la historia de las urbes en que los peatones perdimos nuestro derecho a la ciudad. El espacio público otrora el espacio del desarrollo de las actividades comunitarias, se transformó en espacio de circulación vehicular. Las otras funciones del espacio público quedaron minimizadas y trataron de solventarlas creándole espacios especializados. Hubo un momento en que se llegó al extremo de especializar por zonas las diferentes funciones urbanas. Se fomentó y se experimentaron nuevas ciudades con zonas de residencia, zonas industriales, zonas de comercio, zonas de trabajo, y zonas de recreación, vinculadas entre sí por vías. Pero sobre todo hubo muchas intervenciones de renovación en función de dar cabida a los autos y a la circulación vehicular, destruyendo grandes núcleos históricos, perdiendo el sentido de espacio social del espacio público y con ello marcar la tendencia del desarrollo de las nuevas áreas urbanas. Las ciudades crecieron y crecieron, se poblaron con suburbios y nuevos barrios en donde el espacio público estuvo destinado en su mayor parte a la “rápida circulación” vehicular. Y se lo sigue haciendo. Tanto así este modelo de ciudad está vigente y tan metido en la cabeza de planificadores, autoridades, técnicos, medios de comunicación, académicos, estudiantes, ciudadanos comunes y corrientes, que es muy difícil romper este esquema. Las ordenanzas nos obligan a dejar el mayor espacio para la circulación vehicular y lo mínimo para el peatón, incluso para calles locales. Se piensa tan solo en la circulación, y de acuerdo a eso lo lógico es que los peatones necesitamos menos espacio para circular porque ocupamos menos espacio. Se extienden las urbes a zonas lejanas y se crean grandes vías para ello. Es la lógica del automóvil, es la pérdida de la escala humana.
526 _aArquitectura
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_aComunidad y desarrollo
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