Elogio de los jueces / Piero Calamandrei
Tipo de material:
- texto
- no mediado
- volumen
- 9789587491111
- 347.014 C141el 2012
Tipo de ítem | Biblioteca actual | Colección | Signatura | Copia número | Estado | Fecha de vencimiento | Código de barras | |
---|---|---|---|---|---|---|---|---|
![]() |
Juan Montalvo Sala general | Col. General | 347.014 C141el 2012 (Navegar estantería(Abre debajo)) | Ej.1 | Disponible | 00014961 |
Incluye bibliografía
I. De la fe en los jueces primer requisito del abogado - II. De la urbanidad (o de la discreción) de los jueces - III. De ciertas semejanzas y de cierta diferencias entre jueces y abogados - IV. De la denominada oratoria forense - V. De cierta inmovilidad de los jueces en la audiencia pública - VI. De ciertas relaciones entre los abogados y la verdad o bien en la obligada parcialidad del defensor - VII. De ciertas aberraciones de los clientes que los jueces deben recordar en disculpa de los abogados - VIII. Consideraciones sobre la debida litigiosidad - etc...
Catedrático de la Universidad de Florencia y diputado en el Parlamento Italiano, Pietro Calamandrei fue, junto a Carnelutti y Enrico Redendi, uno de los principales inspiradores del Código de Procedimiento Civil Italiano de 1940. Discípulo de la escuela de Giussepe Chiovenda, Calamandrei es, sin duda, uno de los más destacados procesalistas de finales del siglo XX. Miembro de la prestigiosa Academia Nazionale dei Lincei, director del Instituto de Derecho Procesal Comparado de la Universidad de Florencia, director, con Carnelutti, de la "Revista de Derecho Procesal" y de la revista "El Foro Toscano" (junto a Finzi, Lessona y Paoli), del Comentario Sistemático de la Constitución Italiana y fundador de la "Revista Cultural Il Ponte". En "Elogio de los Jueces escrito por un abogado", "El profesor abandona un día sus severas especulaciones científicas y pone su ingenio, de fama internacional, en el ara de la más excelsa virtud y al servicio de su sacerdocio, para rimar en verdaderas poesías el canto y loa de su amor por la función judicial. Porque enfrentarse con la plebeyez de las preocupaciones contra la justicia y sus servidores, divulgadas en todos los tiempos y con virulencia corrosiva en los actuales, requiere la vocación prócer del sacrificio de otro hidalgo, que cual el de nuestro Cervantes, aleje con su fuerte brazo a los malandrines que les acosan. Seguramente no ha de faltar intención a muchos para mantear también a nuestro héroe, a quien no podrá alcanzar nunca la ofensa de torpes acometidas".
Derecho
No hay comentarios en este titulo.