La arquitectura flexible se adapta a nuevos usos, responde a los cambios en lugar de estancarse y presenta elementos móviles más que estáticos. Se trata de una forma de diseño que por su propia naturaleza resulta multidisciplinar y multifuncional. Y por ello es innovadora y un modo de expresión del diseño contemporáneo, entender su concepción su diseño, su construcción y el uso al que se destine ayuda a comprender su potencial para resolver problemas presentes y futuros asociados con los cambios tecnológicos, sociales y económicos